martes, 14 de marzo de 2023

CONSCIENCIA Y SOMBRAS








































Escribe: Gabriela Borraccetti *

El péndulo de la mente alterna entre sentido y sinsentido, no entre el bien y el mal. (Carl Gustav Jung)

La consciencia es aquello que conocemos, aquello para lo cual no debemos hacer ningún recorrido mental, más que apelar a nuestra memoria, a nuestros sentidos y a todo lo que resulte de nuestro razonamiento, deducciones y demás procesos mentales los que, incluso automáticamente, pueden llevamos a destino durante el día. Todos sabemos cómo llegar a nuestro hogar, a nuestro trabajo y a la casa de nuestros parientes, y para ello no hace falta sentarnos en ningún lugar a hacer cadenas asociativas.
Sin embargo; ser plenamente CONSCIENTES implica recurrir a hurgar en nuestras sombras, en ese sitio que es como un cuarto sin luz en el que siempre hay actividad y que pareciera, entre otras cosas, estar habitado por fantasmas y memorias mucho más intrincadas e incluso arcaicas, que no están disponibles para nosotros con un simple chasquido de dedos. La complejidad de aquello que se halla en penumbras dentro de nosotros mismos, tiene la característica de ser algo así como un pez de las profundidades, huidizo y renuente por completo a ser pescado con una sencilla carnada; aunque la creencia popular haya tomado como válido que un pequeño esfuerzo o reflexión basta y sobra como para interpretar cualquiera de sus productos, sobre todo; los enigmáticos sueños que pueblan el momento en que dejamos de lado, al menos, parcialmente, a nuestro vigía consciente.
En el cuarto de la sombra, y en contraposición a la claridad de la Consciencia, está lo Inconsciente, aquello a lo que sólo podemos acceder de la mano de quien reconozca sus huellas imperceptibles en nuestras palabras, relatos, frases, sueños, chistes, actos fallidos y productos oníricos. Sólo podrá ser hábil en los descubrimientos, aquel psicoanalista que ponga en la base de su edificio teórico, pero sobre todo; práctico, la existencia de aquel sitio oscuro que descubrió en una instancia Freud y que más tarde tuvo un alcance mayor y más abarcativo de la mano de Jung. Y nadie estará más lejos de hallar un tesoro oculto real, que aquellos que hagan gala de interpretaciones fuera de contexto analítico, sin más conocimiento que los frutos de su propia imaginación y proyecciones inconscientes.
En síntesis, somos la combinación de luces y sombras a las que podremos acceder de la mano de un Otro, cuyo único deseo es la búsqueda de una verdad que por lo pronto, suele no ser accesible.
Quien tenga la intención de hacerse más CONSCIENTE deberá, como primera medida, admitir la existencia de algo que lo habita en calidad de incognoscible, siendo la frase socrática "Sólo sé que no sé nada", un mantra que repetirá cuanto más se conozca.

Lic. Gabriela Borraccetti
Psicóloga Clínica
M. P. 16814

Imagen: Adrian Borda, “The Path to Inner Light (El camino a la luz interior)”, óleo sobre tela, contemporáneo.

* Gabriela Borraccetti (n. 1965, Vicente López, Buenos Aires), es licenciada en Psicología por la Universidad Argentina John F. Kennedy. De extensa trayectoria profesional, ejerce como psicóloga clínica especializada en el diagnóstico y tratamiento de la angustia, el estrés, los temas de la sexualidad y los conflictos derivados de situaciones familiares, de pareja y laborales. Es, además; poetisa, cuentista y artista plástica. 
Para contactar con ella por consulta psicológica o terapia psicoanalítica, enviar e-Mail a licgabrielaborraccetti@gmail.com o Whatsapp al +54 9 11 7629-9160.