sábado, 1 de noviembre de 2025

SOY LO QUE SOY


















Escribe: Juan Carlos Serqueiros

Quiero batir mi prontuario… pa' que sepan cómo soy. (Norberto Aroldi)

Detrás de lo que se manifiesta en eso que mi modo de ser exterioriza, exhibe, delata, sin disimulo y sin tapujos; está lo de mi naturaleza, lo que en esencia soy: un tipo básicamente triste, solitario, melancólico, parco, y con un carácter de mierda. Ah, y como si todo eso fuera poco; encima soy tímido.
No me gustan las multitudes, salvo las concentraciones populares peronistas, o las que se congregan en la cancha de Huracán o en las misas del Indio Solari. A lo sumo y como mucho, la pequeña multitud acotada a la concurrencia a una comida familiar o a una mesa de café o a un asadito entre amigos. Y hasta ahí llego; TODAS las demás me repugnan, me espantan y les huyo como a la peste.
Me siento relajado y feliz viendo y escuchando a un artista que me guste en un boliche chiquito, incómodo, casi a oscuras, lleno de humo y vahos de alcohol (donde en ocasiones, hasta puedo atreverme a cantar algunos tangos); antes que en un recital multitudinario, aún cuando yo me encuentre en el más oneroso de los palcos con el culo apoyado en una butaca ultra mullida y repantigado a mis anchas.
Por último, amo el silencio; no soporto el cotorreo incesante de conchudas y/o pelotudos puestos a boquear estupideces y empeñados en ofender al silencio con un rumor exasperante de cacatúas histéricas.
Dado que no constituyo precisamente lo que llamaríamos una celebridad y que la galería de la fama por cierto no se engalana con mi foto, seguramente a muy pocas personas (por no decir directamente ninguna) les debe interesar cómo soy y mucho menos lo que pueda consignar a la hora de auto describirme. Lo cual, por otra parte; está en estricta correspondencia con mi grado de preocupación sobre cómo todas y cada una de las personas que habitan este mundo me perciban o cómo de bien o mal les caiga yo, lo que a fuer de sincero, me importa la nada misma.
En mi caso, el envase deja traslucir el contenido, y si me tomo el laburo de aburrir palabras para contar cómo soy, es por pura condescendencia nomás, solamente para que nadie se llame a engaño. 
Soy lo que soy.

-Juan Carlos Serqueiros-