martes, 19 de septiembre de 2023

APOLOGÍA DE LA DISCUSIÓN



















Escribe: Gabriela Borraccetti (*)

La ciencia es fría. Un esqueleto de conceptos que muchas veces deja sin responder cuestiones básicas en teorías gigantes. Por ejemplo, hasta ahora, nadie se había ocupado de explicar qué es lo que hace que la galaxia esté en expansión tal como lo está un globo que se infla. No obstante, sus representantes de guardapolvo blanco, obviaron preguntarse… ¡quién llevaba a cabo la acción de inflar!
Muchos de los huecos que quedan en la lógica, son complementados sabiamente por la filosofía, que dirige su mirada al mundo sin necesidad de comprobar con hechos sus pensamientos.
Por lo tanto, una pareciera pertenecer al hemisferio izquierdo, racional y lineal. La otra, al derecho, imaginativo, creativo e irracional.
Pero locierto es que en la mayoría de los casos, ambos hemisferios trabajan juntos; con la salvedad de que los porcentajes varían en la composición de un pensamiento o cuerpo teórico. Tratar de que ambos lados del cerebro no peleen y procurar no pasarnos la vida defendiendo al uno o al otro, sería un buen comienzo para evitar polarizarnos en cualquiera de los dos, y abstenernos de crear versus innecesarios en los que todo se transforma en una pelea de box entre dos contendientes o un partido de fútbol entre dos bandos rivales.


Entonces, digamos que las soluciones empiezan por casa, muy dentro nuestro y en cada pliegue de nuestro cerebro.
Si tal como se ha demostrado, el pensamiento precede a la acción; comencemos entonces por pensar que todos en alguna medida tenemos una parte de la verdad. Ambicionar poseerla toda, es una meta que sólo podría alcanzarse si se acepta que de hecho, somos bastante limitados. Acto de humildad este que muchas veces se nos escapa de las manos sin darnos cuenta de que es la clave del primer paso hacia la sabiduría.
¿Cómo? ¿Que quién pudiera? Mire, todos podemos crear nuestros diálogos mentales, en los que lo racional discuta con lo fantasioso, lo práctico entrelace sus manos con lo emocional, e incluso; la mentira se mezcle con la más pura verdad, porque los velos no hacen otra cosa que demostrar que debajo de ellos… siempre hay algo que buscar.
Sin embargo, la aspiración al todo debe venir precedida por la más pura consciencia de nuestros límites, y de saber que la tesis (aquello que afirmamos), es seguida por la antítesis (lo contrario de lo que afirmamos), antes de llegar a la síntesis, que es ¡un concepto inclusivo!
Como enunció Jacques Lacan: la verdad no toda es. Y nunca nadie puede poseerla por completo, quizá porque la palabra misma… carece de completitud.

Lic. Gabriela Borraccetti
Psicóloga Clínica
M. P. 16814

* Gabriela Borraccetti (n. 1965, Vicente López, Buenos Aires), es licenciada en Psicología por la Universidad Argentina John F. Kennedy. De extensa trayectoria profesional, ejerce como psicóloga clínica especializada en el diagnóstico y tratamiento de la angustia, el estrés, los temas de la sexualidad y los conflictos derivados de situaciones familiares, de pareja y laborales. Es, además; poetisa, cuentista, artista plástica y astróloga. Para contactar con ella por consulta o terapia, enviar e-Mail a licgabrielaborraccetti@gmail.com o Whatsapp al +54 9 11 7629-9160.