Escribe: Gabriela Borraccetti
La historia es una reconstrucción del tiempo a partir de sus huellas, y si bien nadie puede ser plenamente imparcial y objetivo; una sola cosa puede darse por cierta: si lo que motiva al historiador proviene del placer y la vocación, el resultado será mucho más fidedigno que si su impulso se genera en la ambición de poner de su lado al prócer que más votos pueda proporcionarle.
Lic. Gabriela Borraccetti
Psicóloga Clínica