En este mundo que nos pintan de gris todos los días, en el que nos han instalado la idea de que los sueños sólo pueden comprarse; definimos la alegría según nuestra vida se asemeje o diste de las publicidades de T.V., tenga "superávit", o se encuentre en "default".
Gracias a este lenguaje que "mide" por lo mucho o por lo poco; creamos relaciones basadas en este principio de cantidad, y vamos reemplazando el "valor"; por el peso del signo pesos, como condición de nuestras relaciones.
Cuando nos defraudan, nos quejamos de esta "miserable" vida; y así reciclamos un círculo vicioso, cada vez un poco más gris.
Si somos capaces de advertir que esta maquinaria está siendo alimentada por pensamientos cuantitativos; podremos vislumbrar que lo realmente valioso está en el corazón, que existen sueños con alas a los que nunca debiéramos renunciar, y que su única medida es el amor con el que elijamos rodearnos de vínculos, trabajo, amigos, o hobbies ya sean o no “significativos”.
De este modo, puede que comencemos a ver otros colores en el horizonte fuera del gris con que se imprimen los billetes, y junto con ello, a salir del condicionamiento de las palabras en el que como robots, nos hemos sumergido sin darnos cuenta hasta dejar de recordar un poco cada día, que somos seres humanos y no cifras de un balance que así, no nos va a cerrar nunca.
El pensamiento siempre es generador de estados de ánimo y creador de las circunstancias en las que vivimos; y estar basándolo en cuentas, solo hará que una gran mayoría que no nació destinada a llevar el apellido Rockefeller, se sienta abatida y haciendo constantes comparaciones respecto de "cuánto mejor podría vivir si tuviera…".
Nada podrá cambiar al extremo de volvernos millonarios en el mundo de la materia, pero sí puede llegar a girar 180 grados aquello que elegimos sentir y pensar respecto de cuánta suerte tenemos por haber nacido siendo quienes somos.
Recuerda: valorarse no tiene precio.
Lic. Gabriela Borraccetti
Psicóloga Clínica
M. P. 16814
Imagen de portada: Marcos Alvarado, “Amor propio”.
* Gabriela Borraccetti (n. 1965, Vicente López, Buenos Aires), es licenciada en Psicología por la Universidad Argentina John F. Kennedy. De extensa trayectoria profesional, ejerce como psicóloga clínica especializada en el diagnóstico y tratamiento de la angustia, el estrés, los temas de la sexualidad y los conflictos derivados de situaciones familiares, de pareja y laborales. Es, además; poetisa, cuentista, artista plástica y astróloga. Para contactar con ella por consulta o terapia, enviar e-Mail a licgabrielaborraccetti@gmail.com o Whatsapp al +54 9 11 7629-9160.