domingo, 18 de diciembre de 2011

EL JUEZ DE TU CONDUCTA ES TU CONCIENCIA




















Escribe: Juan Carlos Serqueiros

Sólo ha de dar explicaciones a los demás quien sienta la necesidad de sacudirse un peso de encima. 
El único juez de tu conducta, pensamientos y sentimientos, habrá de ser tu propia conciencia; no hay tribunal más supremo que ese.
Al galopar por la vida, será inevitable que levantes polvo, pero quien te conoce y te quiere no habrá de fijarse en tu ropaje andrajoso por los jirones que hayan quedado en los riscos ni en las motas que en el camino se le hayan pegado; sólo evaluará la pulcritud inmaculada de tu alma noble. 
Y esa calidad de nobleza, es la que deberás conservar siempre.

-Juan Carlos Serqueiros-