viernes, 25 de noviembre de 2011

DIVINA T.V. FÜHRER




















Escribe: Juan Carlos Serqueiros

Bueno, hoy elegí meterme en honduras y referirme al 5º track de Oktubre, un tema que se las trae: Divina T.V. führer.



Oktubre es un disco conceptual, y verdaderamente conceptual, esto es, no conceptual porque trate de la misma temática en todas las letras de las canciones que lo componen; sino conceptual en tanto lo que transmite. Es un disco para homenajear a todas las revoluciones del mundo en la rusa de octubre de 1917, pero como no lo hace desde una posición ideológica ni partidaria; esa no dependencia de lo dogmático, le permite a Solari incursionar en asuntos tangencialmente vinculados.
Precisamente por ello, puede incluir en Oktubre un tema que, si bien no está concatenado directamente con la revolución rusa de octubre de 1917; sí lo está en cierto modo, ya que Divina T.V. Führer es una viñeta sobre el totalitarismo: la revolución rusa, iniciada bajo los auspicios de la hermandad proletaria mundial, degeneraría luego en el totalitarismo stalinista, y como el Indio es un gourmet exquisito tanto en lo gastronómico como en lo intelectual; ¿qué mejor que lo orwelliano a la hora de hablar de totalitarismos? 
La letra dice:

¡Me estoy por ahogar!
¡Me voy a pique! ¡Glu-glu!
¡Me está por hundir mi fiel fantasma Bu-Buuu!
Si no me protege el empleado mayor
(que proyecta todo el tiempo mi televisor)
seré promovido para Navidad
¿Cómo no se nos ocurrió?
Voy a exagerar, mi fiebre no es tan alta
Esta es la cita peor (es una cita a ciegas)
¡Al planeta un bombazo le vamos a dar!
(Para que no nos moleste nunca, nunca más)
Seré promovido para Navidad
¿Cómo no se nos ocurrió?
¿No vas a esperar que enfríen a tu amigo?
si ya conocés la forma novedosa
¡Divina TV Führer mi amor!
(donde quiera que vaya, Eveready estará...)
Seré promovido para Navidad
¿Cómo no se nos ocurrió?

“A la mulita hay que agarrarla por la cabeza y no por el rabo”, decía Juan Manuel de Rosas  y tenía razón. Y es justamente eso lo que hay que hacer a la hora de interpretar la lírica solariana: agarrarla por la cabeza, es decir, por el título. En él, el Indio hace aparecer a la televisión como “dirigiendo” las mentes de la gente, manipulando la información, deformándola y orientando los gustos y preferencias de la sociedad hacia donde convenga a los intereses del orden sistémico que ejerce el poder. En ese contexto, la asimila con la figura de un führer (en lengua alemana, un “conductor”, un “salvador”, un líder mesiánico que guía al pueblo germano hacia un destino de grandeza y preeminencia a las cuales cree tener derecho por un supuesto pasado de míticas glorias). El Indio le pone “divina” aludiendo metafóricamente a que el poder de la televisión es comparable a un poder divino, es decir; emanado de Dios; tal cual también lo es el poder del führer, quien por “disposición divina” producirá el “milagro”, conducirá al pueblo alemán a su “destino de gloria inmortal”.
Toda la letra es una alusión poética a la obra literaria más difundida de George Orwell: su genial novela 1984; una feroz crítica al totalitarismo en la cual nos da la descripción aterradora de la vida de los ciudadanos que gimen bajo el yugo de un megaestado totalitario en una nación que denomina Oceanía.

El estado está simbolizado en la novela de Orwell en un personaje: The Big Brother, El Gran Hermano que todo lo vigila y controla a través de la tecnología de las telepantallas, las cuales no solamente son capaces de captar imágenes de modo de vigilar a la población; sino también de emitirlas, con lo cual el estado simbolizado en el Gran Hermano, proyecta constantemente propaganda del Partido sobre la población, publicidad con la cual ocupa las mentes de los ciudadanos.
En la primera estrofa, describe el estado de ánimo de alguien de nuestra propia sociedad, alguien que está hastiado, abatido, harto (“me estoy por ahogar!... me voy a pique… me está por hundir… Glu-glu”); comparándolo con el de Winston Smith, el personaje de la novela de Orwell que va a enfrentarse al orden de cosas establecido por el Partido, al Gran Hermano (“el empleado mayor”, asimilando al ejecutivo principal, el presidente o gerente general -o como se le dice ahora: el CEO- de una cadena televisiva; con el Hermano Mayor de la novela 1984, que es para Winston el “fantasma” que más miedo le infunde -“Bu-Buuu!” escribe el Indio como onomatopeya del ruido con que imaginariamente nos espanta un fantasma).
Solari dice “si no me protege" en un sentido claramente irónico. porque en la novela de Orwell el Gran Hermano “protege” a todos, y si tortura a alguien ferozmente -como lo hará con Winston- es para “protegerlo” de sus “malos pensamientos”, para “redimirlo” de ellos. Lo tortura “por su bien”, es decir, para “protegerlo” de la libertad a la que aspira y que es -esa ansia libertaria- la que lo va a hundir, a “mandarlo a pique” (“glu glu”, escribe el Indio como onomatopeya de estar hundido, tragando agua). A través de esa tortura a que someterá a Winston, el Gran Hermano logrará “reasimilarlo” para el Partido, lo “salvará” de ser “vaporizado”, es decir, muerto, desaparecido. Y compara a la T.V. con las telepantallas a través de las cuales el Gran Hermano vigila y controla a la población en la novela 1984 (“que proyecta todo el tiempo mi televisor”).

Lo de “seré promovido para Navidad ¿Cómo no se nos ocurrió?” es una frase mordaz del Indio, que repetirá como una muletilla a lo largo de toda la letra. Se refiere a que si logra evitar que el Gran Hermano lo “proteja” -es decir, que lo torture ferozmente- conseguirá la libertad (compara la libertad con un ascenso obtenido en el trabajo: antes de la globalización y la consiguiente caducidad de la legislación laboral en los países periféricos como el nuestro, es decir cuando aún existía cierta estabilidad laboral para la gente y leyes que la protegían; era una costumbre oficinesca anunciar los ascensos y promociones en la última semana del año, la semana previa a Año Nuevo, es decir; la de Navidad. Si uno tenía esa suerte; el jefe lo llamaba y le anunciaba que iba a obtener un ascenso, y el consiguiente aumento de sueldo). Pero la frase encierra a la vez una significación muy personal para Solari; ya que con ella también se está refiriendo a una circunstancia coyuntural suya, propia: para la fecha en que se grabó Oktubre, había renunciado definitivamente a su trabajo estable (secretario en un hogar de niños: el Hogar Falcón); con lo cual estaba jugándose su propia suerte en lo económico en un futuro inmediato, a lo bien o mal que pudiera irles a los Redondos con el disco. Él, lógicamente tenía las mejores esperanzas de que les vaya bien y el disco se vendiera masivamente, lo cual esperaba que ocurriera cerca de fin de año (Oktubre fue lanzado precisamente en el mes de octubre de 1986, por lo cual el Indio aguardaba tener para Navidad un pantallazo claro de cómo le iba a ir con ese proyecto).
Con lo de “voy a exagerar, mi fiebre no es tan alta” se está refiriendo a un pasaje en particular de la novela de Orwell: Winston asiste a una sesión obligatoria del Partido: los “dos minutos de odio”, en la cual todos los ciudadanos de Oceanía debían obligatoriamente contemplar colectivamente reunidos ante una telepantalla durante dos minutos diarios, imágenes proyectadas de Emmanuel Goldstein, el archienemigo del Partido, y tenían que abuchearlo e insultarlo, y a la vez proclamar a gritos su incondicional adhesión hacia el Gran Hermano. En una de esas sesiones, Winston cree percibir que un alto funcionario del Partido, O´Brien, le hace un guiño con el cual quiere significarle que él también es enemigo del Gran Hermano, que está en contra del Partido y hastiado de él al igual que Winston (todo eso en la imaginación de éste). De allí lo de “voy a exagerar, mi fiebre no es tan alta”, refiriéndose a que Winston piensa que después de todo, no está tan loco como él mismo suponía; cree que encontró en O'Brien a un aliado, a alguien que odia al Gran Hermano tanto como él.
La frase “esta es la cita peor (es una cita a ciegas)” sintetiza otro pasaje de la novela: Winston ve cada vez más a menudo a una persona que trabaja con él en el Miniver -el Ministerio de la Verdad en la novela de Orwell-: Julia. Al principio, Winston desconfía de Julia, le parece que ella es una espía del Partido y que lo va a delatar al Gran Hermano; pero un día se cruzan en un pasillo, Julia tropieza y se cae, Winston la ayuda a levantarse y ella le desliza un papel en la mano en el cual está escrito “Te amo” (en una actitud claramente “subversiva” hacia el Partido, ya que en Oceanía el amor está prohibido; el único amor permitido y alentado, es el que todos deben obligatoriamente sentir hacia el Gran Hermano). A partir de ese incidente, convienen en encontrarse fuera del alcance de las telepantallas, para que el Partido no los detecte en esa actitud “subversiva”. Pero Winston no está seguro respecto a Julia; tiene dudas, tiene temores, sigue pensando aterrado en la posibilidad de que Julia lo traicione; por eso el Indio escribe lo de “esta es la cita peor (es una cita a ciegas)”.
Luego tenemos lo de “¡Al planeta un bombazo le vamos a dar! (Para que no nos moleste nunca, nunca más)”. Acá se refiere a otra parte de la novela, en la cual Orwell describe detalladamente la organización del megaestado totalitario, que es omnipresente. Lo pinta como una organización burocrática dividida en 4 ministerios: el Ministerio del Amor, al que llama Miniamor y que se encarga de todo lo relativo a mantener la ley y el orden; el Ministerio de la Verdad (en el que trabajan Winston y Julia), al que llama Miniver, que se encarga de controlar todo lo relativo a la información, la cultura y las artes; el Ministerio de la Abundancia, al que llama Miniabu, que se encarga de los asuntos económicos; y el ministerio principal: el Ministerio de la Paz, al que llama Minipaz y que se encarga de los asuntos militares y de guerra (nótese la genial ironía de Orwell, que “bautiza” Ministerio de la Paz... ¡al que hace la guerra!). En la novela, la nación imaginada por Orwell como regida por un megaestado totalitario, se llama Oceanía (que es Inglaterra), y comparte el planeta con otros dos megaestados: Eurasia (que es el resto de Europa y la parte de Asia que estaba bajo la influencia de la URSS), y Asia Oriental (que es el Oriente propiamente dicho, es decir China, Japón, etc.); con los cuales Oceanía está en una suerte de guerra permanente por el dominio del mundo. De allí eso de “¡Al planeta un bombazo le vamos a dar!” aludiendo a la guerra contra los otros dos megaestados en que se embarca Oceanía.
Luego viene la síntesis de otro pasaje del libro; uno en el cual Winston es detenido por la Policía del Pensamiento, la cual lo encierra en una celda del Ministerio del Amor. Allí, se entera de que también apresaron a Parsons, un vecino suyo denunciado al Partido por su propia hija por ser un “crimental”, o sea; en el idioma “ingsoc” (inglés-socialismo) que imagina Orwell en su novela se habla en Oceanía, Parsons es para el Partido un criminal que comete un “delito de la mente”, y por eso es un crimental. De allí lo de “¿No vas a esperar a que enfríen a tu amigo?”, que es una pregunta que en la imaginación del Indio, Winston prisionero en su celda le hace a O´Brien que lo va a torturar salvajemente, refiriéndose con lo de “tu amigo” a que Parsons era un individuo acérrimamente fiel al Partido, y sin embargo lo detienen lo mismo y van a “vaporizarlo”, es decir lo van a matar y desaparecer.
Con lo de “si ya conocés la forma novedosa”; a través de esta frase, O´Brien le responde a Winston su pregunta respecto de qué van a hacer con él. Es como que le está diciendo “ya sabés lo que te espera”, que no es otra cosa que torturas horribles a las que será sometido; y sobre todo, lo que más pavor le infunde a Winston: La “Celda 101”, que es el castigo peor que una persona pueda jamás imaginar, y que no es para todos lo mismo, ya que varía en función del miedo más recónditamente oculto que cada individuo tenga en su mente. En el caso de Winston, su miedo peor es una fobia a las ratas, por lo cual O´Brien, luego de golpearlo y torturarlo ferozmente con descargas eléctricas, le dice que en la Celda 101 será sometido al castigo de que las ratas le devoren la cara. Esa, la Celda 101 es la “forma novedosa” que tiene el Partido para “curar y reabsorber” a quienes cometen el “delito” de pensar en la libertad, oponiéndose al Gran Hermano.
Ahora llegamos a lo de “¡Divina TV Führer mi amor! (donde quiera que vaya, Eveready estará...)”. Con esto, el Indio cierra el esbozo de la situación que pinta en la letra: La televisión es el orden que emana de lo “divino”, es el “fürher” que nos llevará a la Felicidad, la Verdad y la Libertad; asimilando ese concepto con un Winston ya “curado” por el Partido, “reabsorbido” para el sistema -la novela de Orwell termina con Winston en libertad; pero claro: una libertad... aparente. O'Brien lo libera luego de que Winston le rogara que el castigo de la Celda 101, consistente en que las ratas le devoren la cara, no se lo apliquen a él; sino a Julia. La “moraleja”, es que tan omnipotente es el sistema (el Partido), que no hay nada por encima de él; por eso Winston pide que le apliquen al ser que más ama sobre la tierra el castigo antes de tener que sufrirlo él. O sea, antepone al amor que cree sentir por Julia; el amor y la lealtad hacia el Gran Hermano. En ese instante O´Brien comprende que Winston ya está “curado”, es decir, ya no representa un peligro para el sistema, y por eso lo “libera”. "Donde quiera que vaya Eveready siempre estará" era una famosa propaganda de las pilas marca Eveready, abundantemente difundida en la tele. En este caso el Indio utiliza esa publicidad, asimilándola a la presencia inevitable del Gran Hermano: donde quiera que vaya Winston, ahí estará presente el Gran Hermano; The Big Brother es omnipresente al igual que las pilas marca Eveready. Pero Solari, en su genialidad, hace una pequeña “trampita”: a la propaganda de Eveready le quita la palabra “siempre”; en la letra no la incluye. Está mandando simbólicamente un mensaje esperanzador; a pesar de lo crudo y pesimista de la temática de la novela de Orwell: al quitar “siempre”, está a la vez significando que hay una luz de esperanza para la Libertad: la de que no “siempre” haya un Gran Hermano.
La letra termina con esa muletilla de “Seré promovido para Navidad ¿Cómo no se nos ocurrió?”, y hay una razón para que así sea: La novela de Orwell concluye con un Winston que es finalmente “promovido” por el Partido: el tipo medita sobre el amor incondicional que siente hacia el Gran Hermano, lo cual no es por cierto un mensaje esperanzador, al contrario; es un final triste, claramente pesimista, en contraposición a la lucecita de esperanza que antes dejó latente el Indio con la supresión de la palabra “siempre” en la frase alusiva a la propaganda de las pilas Eveready.

Enlace a la canción en You Tube: http://www.youtube.com/watch?v=QIfZ-6II7RM

-Juan Carlos Serqueiros-

13 comentarios:

  1. TE PASASTE AMIGO! BUENISIMO me gustó tu interpretación, muy completa

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  2. muy pero muy bueno loco!! muy buen analisis

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  3. Muy bueno. Si bien lo de la relación con la novela de Orwell era muy marcada, no tenía en cuenta el conocimiento sobre la vida personal del Indio. Justamente hablando con unos alumnos de Orwell los otros días me acordé de este tema, ya les voy a recomendar visiten esta página para abrir más los ojos.

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  4. Gracias! Buenísima esta interpretación, hermosa y completa!

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  5. Sos un enfermo locon! No dejas con ganas en ninguna de tus interpretaciones! Gracias!

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  6. Terrible historia e interpretación, sabés tanto como el Indio (y un poco mas? Jaja). Lo único que difiero es en la parte en que decís que sacando el "siempre" de este slogan/lírica da una especie de signo esperanzador, y yo creo que el 'Eveready' es así mismo el estado de ese Gran Hermano: siempre listo, o siempre preparado, porque está en todos lados y es el ente superior que los rige. Me paso horas viendo tus publicaciones viejas y nuevas, y cada detalle que das muestra tanto tu intelecto como el escenario donde se escribió cada letra del Indio Solari. Gracias!

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  7. Tremendo! simplemente genial. Gracias!

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  8. Maravilloso. Un gusto leer algo tan genialmente analizado.

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  9. A mis 33 años empecé a escuchar los redondos cada letra me genera gran curiosidad !! Este disco en particular para la época en que fue grabado me parece algo fabuloso ... Esta canción me levanta el ánimo sin siquiera interpretar bien lo que dice !!! Ja ja .. muy buen análisis !!! Genio !!

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  10. impresionante tu análisis, lo disfrrute muchisimo y me hizo entender varios fragmentos de la letra. Por otro lado incireible la genialidad del indio para plasmar la novela con una letra metafórica y sublime. Tu analisis me hizo acordar mucho a un capitulo de Black Mirror (Justamente una serie que habla de los puntos oscuros y peligrosos de la tecnología). Me refiero al segundo capitulo, el protagonista es un hombre de piel oscura, que vive en un mundo totalmente controlado y estandarizado, e intenta revelarce contra el sistema a raiz del amor que siente hacia una chica y el daño que este sistema le produjo a ella. Es muy parecida la temática de lo que describís en tu análisis y lo más oscuro del capítulo es que en el final del mismo el termina uniéndose al sistema al igual que lo hizo winston en la novela. Saludos y muchisimas gracias

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  11. Respuestas
    1. No, no soy el Indio, y ya quisiera yo tener su genio al escribir poesía. Soy Juan Carlos Serqueiros, como podés ver en "Autor", en "Quiénes somos" y en "Contacto".

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