miércoles, 17 de abril de 2024

LA NACIÓN ARGENTINA: INVOLUCIONANDO FAVORABLEMENTE


















Escribe: Juan Carlos Serqueiros

En 1899, siendo presidente de la República el general Julio A. Roca, en ocasión de dirigirse al encuentro que mantendría en Punta Arenas con el mandatario chileno Errázuriz, lo hizo a bordo del flamante acorazado Belgrano, el cual fue pilotado personalmente por el ministro de Marina, comodoro Martín Rivadavia, navegando, en un alarde de coraje, por el llamado "camino del sudoeste", es decir, los inextricables canales fueguinos, una ruta peligrosísima y sin precisar; que estaba apenas esbozada en las cartas marinas.
Y años después, siendo presidente de la Nación el doctor Roque Sáenz Peña, el 10 de Agosto de 1912 se inauguró la Escuela de Aviación Militar, y ese día, el vuelo inaugural lo realizó el mismísimo ministro de Guerra, general Gregorio Vélez, quien demostró su temple y su valor volando en un frágil avioncito de tela en aquellos tiempos en que la aviación aún estaba poco menos que en pañales.
Tanto lo de Roca como lo de Sáenz Peña respectivamente, significaba proclamar ante el mundo entero: "Soy el presidente de la Argentina, teniente general de su ejército, y no luzco los entorchados por haberlos obtenido en algún pasillo, sino que gané todos y cada uno de mis grados en los campos de batalla. Y confío plenamente en el profesionalismo y la eficacia de mi ministro de Marina, al punto de viajar yo mismo por aguas desconocidas en un buque de guerra pilotado por él"; y "soy el presidente de mi país, Argentina, héroe de Arica y general del ejército del Perú, mis galones militares los gané combatiendo en la guerra del Pacífico, y mi ministro de Guerra no es un burócrata de escritorio, sino un general que no manda a un subordinado a subirse a un precario avión de tela, sino que lo hace él mismo sin vacilar".
Ahora comparemos todo aquello con la espantosa realidad que hoy en día tenemos: un presidente de la República como el coprolálico Javier Milei, que es un psicótico incestuoso con delirio mesiánico y veleidades de tiranuelo; y su ministro de Defensa, Luis Petri, un patéticamente ridículo personaje bueno para nada que ama travestirse de militar, entiende de defensa lo mismo que yo de física cuántica, parece surgido de una historieta y se arma un book con fotos trucadas en las que simula estar a bordo de un avión de combate (que encima; es pura chatarra de 40 años pagada a precio de oro) cuando no sabe manejar ni un triciclo.
"Gracias" al voto de 14 millones y medio de descerebrados, descorazonados, desalmados, ignorantes, cipayos, desaprensivos e irresponsables; la otrora gloriosa nación argentina ha caído inerme en las garras de semejante lacra e involuciona favorablemente en el concierto de las naciones del mundo.

-Juan Carlos Serqueiros-

1 comentario:

  1. Sos un crack JUANCA. Te leo desde los blog ricoteros. Te dejo mi celu para intercambiar mensajes 1157517565

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