(Poema de Juan Carlos Serqueiros)
Trasegué toda la noche
(Esta larga noche-día)
Hasta las heces los venenos
Que me deportan a la nada
Porque tan sólo me libero
Cuando nada importa nada
Cuando retorno a la Nada
Justo después de entender
(Aunque más tarde que temprano)
Que al final lo de Thelema
No había sido tan errado
Si Dioniso se garchó a Afrodita
Y Ariadna igual le dio su amor
Hacé lo que quieras es ley
Gargantúa a Pantagruel contó.
Toda la noche me encharqué
(Inextinguible noche-día)
Y la mierda dispersó mi sangre
En cien mil partículas de nada
Y la mierda cubrió mis sueños
Que son aún menos que la nada
Codas fugaces de una partitura
Por algún Otro pre-escrita
(Y prescripta)
Y en la mierda flores marchitas
Con pétalos de celuloide
Y con tallos de cartón
En la paleta de un pintor
Harto ya de los colores.
Toda la noche me masturbé
(Extensa-intensa noche-día)
Flagelé mi sexo sin poder gozar
Y toda la noche inhalé
Mentiras blancas de soledad
Embriagado con orines tibios
En un remoto edén fantasmal
Donde conchas pijas culos tetas
Desfilaban sin cesar.
Anhedonia-culpa-displacer atroz
(Esta afiebrada noche-día)
En que las ménades me llevan
Del nirvana al socavón
Cuando del absurdo surge una voz
Que me incita y me reclama
Que me putea y que me alaba
Que me abisma en la negritud
De una cloaca con palabras
Que son vocablos inentendibles
Que no sirven ni expresan nada.
Un aeropuerto con vuelos
Que parten a ningún lugar
Ya sin tiempo y sin espacio
Sólo esta negra oquedad
De recuerdos y de olvidos
De calma y de tempestad
Y unas tenaces cadenas
(Que no sé si quiero cortar)
Hechas de risa y de llanto
Entre caprichos del azar
Nada es Todo y Todo es Nada
Y es la sola meta mía
Volverme ahora a la nada
(Esta interminable noche-día)
Noche en la que Nada es Todo
Noche en la que Todo es Nada.
-Juan Carlos Serqueiros-